Bioestimulación facial

Mejoramos la densidad y elasticidad de la piel, con inductores de colágeno o bioestimuladores

Bioestimulación facial:
Reforzando los cimientos de tu piel

La bioestimulación facial es una técnica clave para rejuvenecer el rostro de forma natural y armónica, trabajando desde el interior de la piel. A través de inductores de colágeno (como la hidroxiapatita o el ácido poliláctico), ACP y polinucleótidos, se estimulan los fibroblastos para redensificar, engrosar y fortalecer las capas profundas. Allí es donde se produce el colágeno y la elastina, responsables de la firmeza y calidad cutánea. Es un proceso gradual que comienza a activarse entre los 2 y 3 meses, por lo que requiere paciencia, pero supone una verdadera inversión en el “banco de colágeno” de la piel.

Podemos imaginar la piel como un edificio: si los cimientos son firmes, todo lo que se construya encima será más estable y duradero. De la misma manera, al reforzar la arquitectura interna de la piel, se mejora su tensión, firmeza y capacidad de sostén. Esto crea una base sólida para cualquier otro tratamiento estético, proporcionando resultados más óptimos, naturales y duraderos en el tiempo.

¿Qué utilizamos para bioestimular la piel?

Inductores de colágeno

La hidroxiapatita de calcio o el ácido poliláctico, estimulan de forma progresiva y natural la producción de nuevo colágeno durante los 2-3 meses posteriores, mejorando la firmeza, la densidad y la calidad de la piel a medio y largo plazo.

ACP (Ácido Hialurónico 200 kDa)

El ACP (Ácido Hialurónico de bajo peso molecular, aprox. 200 kDa) actúa como un potente bioestimulador dérmico, no por rellenar, sino por activar procesos celulares que favorecen la producción de colágeno y elastina.

  1. Penetra en capas más profundas
    Al ser de bajo peso molecular, el ácido hialurónico puede llegar mejor a la dermis profunda, donde se encuentran los fibroblastos.

  2. Activa los fibroblastos
    Una vez allí, estimula estas células para que produzcan nuevo colágeno y elastina, reestructurando la matriz extracelular.

  3. Efecto reparador y antiinflamatorio controlado
    Genera una leve respuesta biológica que desencadena mecanismos de reparación tisular, favoreciendo la regeneración y densificación de la piel.

  4. Mejora la hidratación profunda
    El ácido hialurónico atrae y retiene agua, creando un entorno ideal para la actividad celular y ayudando a que el nuevo colágeno se forme en un tejido sano y bien hidratado.

Polinucleótidos

Los polinucleótidos son moléculas derivadas de fragmentos de ADN que actúan como potentes bioregeneradores celulares. No rellenan ni aportan volumen, sino que estimulan y reparan activamente el tejido desde dentro, convirtiéndose en uno de los tratamientos más avanzados para la bioestimulación faciaActivación de fibroblastos

  • Los polinucleótidos interactúan directamente con los fibroblastos, estimulando su actividad para aumentar la producción de colágeno tipo I y mejorar la estructura dérmica.
  • Regeneración celular profunda
    Favorecen la reparación del ADN celular y optimizan el entorno biológico, acelerando los procesos de recuperación y mejorando la vitalidad de la piel en tejidos envejecidos o dañados.

  • Efecto antioxidante y antiinflamatorio
    Neutralizan radicales libres y reducen microinflamaciones, protegiendo la piel frente al estrés oxidativo, lo que permite una formación de colágeno más eficiente y duradera.

  • Bio-hidratación prolongada
    Tienen gran capacidad para captar agua, generando un entorno óptimo para la síntesis de colágeno y elastina, con una hidratación profunda y sostenida en el tiempo.